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No cabe la menor duda de que el mago se forma desde el desconocimiento más absoluto hasta conseguir la técnica y presentación suficientes como para ser considerado ilusionista. Por tanto, podríamos considerar que el mago se hace.

Sin embargo existen artistas cuyo impecable trabajo te hace pensar que han nacido para ser magos, que tienen el denominado “don artístico”. No obstante hay algo intrínseco en esto. Esa es la sensación que producen al espectador, pero esa sensación es fruto de toda una vida de dedicación, trabajo, estudio y esfuerzo. No te olvides que el mago es el artista de las ilusiones, nada es lo que parece.

Por otro lado, ¿cómo es posible que Miguel Ángel fuera considerado un genio con 12 años de edad? ¿Qué hizo que Mozart compusiera obras maestras desde su más tierna infancia? ¿Acaso no tuvieron un don innato genios de la literatura como Shakespeare, Cervantes o Dante Alighieri?

Todavía queda mucho por estudiar en nuestra inmensa cadena de ADN. Hay quienes aseguran que en ella se reflejan también los dones y que existe realmente el denominado “don artístico”. Quizá sea posible, no suena tan descabellado. Pero pese a que realmente exista un gen que imponga en un individuo una tendencia a hacer bien una actividad, después ha de venir la curiosidad, auténtico motor del aprendizaje, y después de mucho trabajo, estudio y esfuerzo, podrá ser uno un genio, de la magia, por ejemplo.

Nos quedamos con que el artista nace y el mago se hace. Puedes tener una cierta predisposición artística pero necesitarás muchos conocimientos y experiencia para crear verdadera MAGIA con mayúsculas y no realizar unos simples trucos de magia.

Esta es mi opinión, pero me gustaría conocer la tuya, ¿tú que opinas?

Muchos de nosotros realizamos juegos o trucos de magia, pero...¿quien llega de verdad a producir ese instante en el que los espectadores quedan alucinados? Pienso que aunque nosotros aprendemos juegos de los libros y dvds que andan por ahí, cada vez con más facilidad, cuando vemos a uno de nosotros que se "sale" de lo cotidiano y no me refiero a los juegos que haga, sino a como los haga, detectamos que ahí hay un artista, al menos uno diferente, uno que llega a su público y que no sólo hace trucos, sino que hay algo más que llega a transmitir.
Naturalmente que todo se aprende, técnicas, pases, charlas. Pero hay que tener "algo más" que nadie te enseña, eso lo tienes o no.

¡¡ Digo yo !! Saludos, Melgar

Completamente de acuerdo, hay gente que con su sola presencia, sin hablar siquiera, ya están transmitiendo algo.

Un claro ejemplo de lo que hablo es Avner, el excéntrico. Quién haya tenido el gusto de conocerle sabrá de lo que hablo. Y eso por mucho que se estudie o practique no se consigue nunca si no tienes ese "algo". Pero entonces, ¿podríamos decir que es algo genético?

A mi parecer es algo mas ambiental que genetico, uno es uno mismo y sus circunstancias. Los echos que ocurren a lo largo de nuestra vida van forjando nuestra forma de ser. Lo veo asi por mi propia experiencia, nunca estuve predipuesto para la musica (aun asi soy percusionista) no soy especialmente habilidoso( consegui hacer malabares con 4 bolas ) ahora estoy aprendiendo adiestramiento y psicologia canina aunque nunca he tenido un entendimiento especial y magico con los animales. Todos podemos conseguir hacer cualquier cosa, solo hay que desearlo y trabajarlo.
Aunque tampoco niego una cierta predisposicion no aprendida ya que cada cual nace con unas caracteristicas fisicas y mentales, pero el trabajo lo es todo.
Hace poco lei en la revista quo que el comportamiento,sentimientos,caracteristicas,alimentacion,etc; de la madre durante el embarazo influyen enormemente en la forma de ser del niño...

Buen tema, Shetam. Yo creo que mago puede ser cualquiera (no hablo de llegar a ser un muy buen mago, sino por lo menos un mago correcto que dé gusto verlo). Sin embargo, tenemos el hecho de que no todo el mundo se aficiona a la magia. Esto es porque sí que hace falta una predisposición a que te guste, con mucho de genético. Y esa predisposición es la que te hace aprender, mejorar y no dejar la magia.

Y luego está el tema de si todos los aficionados a la magia pueden llegar a ser buenos magos. Yo ahí creo que sí, que todos, con sus particulares estilos, lo que pasa es que hace falta alguien que les enseñe bien y que no les deje irse por el camino ancho de irse a lo mínimo: hacer el truco más o menos oculto y ya está, sin cuidar otros aspectos que potencian las emociones o la estética del juego. Como dice Melgar, no todos pueden llegar a ser artistazos con un don especial que encandile, que transmita por encima de los demás, pero creo todos los que les gusta la magia pueden llegar por lo menos a ser buenos magos.

El mago nace y se hace