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Solo os quiero comentar que cuando uno sale al escenario, si conoze bien su juego, si tiene estudiada la rutina, si lo tiene empapado, puede y debe estar tranquilo y concentrado. Por supuesto siempre hay algun nervio pero eso se te deberia pasar en cuanto suena el disparo de salida y tu empiezas tu acto saliendo en el escenario.
Nunca te precipites.
Disfruta de tu publico
Remarca los efectos.
Tomate tu tiempo.
no pierdas el ritmo pero no corras
y sobre todo ....disfruta de lo lo que haces entonces haras Magia.

Solo os quiero comentar que cuando uno sale al escenario, si no conoze bien su juego, si tiene dudas en la rutina, si no lo ha estudiado suficientemente, puede y debe estar nervioso y desconcentrado. Por supuesto siempres hay nervios y dolores gastrointestinales que no se te pasanaunque salgas al escenario, es mas transmites esa inquietud nerviosa.Y te olvidas de :
No precipitarte y te lancas al vacio.
Te olvidas d eremarcar los efectos.
Te olvidas del timpo
vas mas rapido que la musica o por detras
y sobre todo acabar cuando antes que estamos destrozando una ilusión.

Estas reflexiones son basadas en mi propia experiencia.
Saludos
Fluss

Hola, fluss. Aparte de los recursos obvios (ensayar bastante para tener seguridad, presentarlo antes varias veces ante personas de confianza para acostumbrarse subconscientemente a que va a salir bien, hacer juegos fáciles y automáticos, en tanto no se haya dominado el tema de los nervios, practicar la relajación un poquito cada día...), aparte de todo eso, hay una cosa muy interesante que debiéramos saber:

LA FARMACOPEA

Hay medicamentos que anulan los nervios. Los que los conocen los emplean en exámenes, en intervenciones en televisión, en conferencias, en cualquier tipo de eventos en que uno pueda ponerse nervioso. Tengo entendido que se llaman beta-bloqueantes. El resultado es que pierdes los nervios completamente.

Me dijeron el nombre de uno pero se me ha olvidado.

Los nervios, si están presentes en cierto grado, se pueden aguantar, e incluso da gusto. Es muy bonita esa sensación de excitación antes de realizar un juego de Magia. Esos serían nervios positivos, digámoslo así, y sentirlos es sentirse vivo. Los que los sientan, no creo que deban hacer mucho por remediarlos. Si te hacen olvidarte de algun matiz o sutileza, no pasa nada, pues no ha salido perfecto y ya está. ¿Y qué?

En cambio, hay personas para las que los nervios son una tortura. Les crean una ansiedad y un sufrimiento que no se puede aceptar de ningún modo. Lo pasan mal haciendo Magia en público. Y esto es para pasarlo bien, chiquillo, como dice Juan Tamariz. Ese tipo de personas, si no les funcionan los consejos obvios del principio, creo que deberían planteárselo a su médico de cabecera. Porque encima, ante una experiencia negativa, la próxima vez estaremos más nerviosos todavía, y no sólo en el momento de actuar sino los días anteriores, no pudiendo dormir o ser felices porque tienes la cuchilla de guillotina de la actuación pendiendo sobre tu cuello, y cada vez se acerca más el día fatal.

Es fácil, es decirle al médico, aprovechando que te ve para cualquier otro tema:

"Mire. Yo soy mago y me pongo muy nervioso cuando salgo a escena. Quiero que usted me recete un ansiolítico, un bloqueante de los nervios apropiado para esta situación."

Y te lo recetará él o te enviará a un psiquiatra que es el que receta más propiamente estas cosas. No es nada denshonroso acudir a un medicamento, igual que si te duele la cabeza te tomas una aspirina. Los nervios excesivos son una enfermedad, y se curan primero psicológicamente, y si no psiquiátricamente. Así que... ¡tengamos la fiesta en paz!, nunca mejor dicho.

[El Gran Pantuni]

[El Gran Pantuni]

Cada uno cuenta su propia experiencia.
Me temo que no es un problema exclusivo de los magos. Esa tensión inicial la he experimentado a lo largo de mi vida en miles de ocasiones: exámenes, oposiciones, presentaciones, charlas en distintas lenguas, conferencias, clases universitarias, teatro... y como no, magia.
¿Qué tienen en común todas estas situaciones? Tenemos delante un auditorio que depende enteramente de nosotros y no queremos defraudarle.
No soy partidario de las medicinas, que pueden producir efectos nocivos incontrolables, ni mucho menos tomarse unas copas para darse ánimo, prefiero los medios naturales. Hay que conseguir un estado de relajación y para ello existen técnicas muy dispares. Yo personalmente y desde hace ya algunos años practico el chi kung o qi gong.
Cualquiera que sea la situación a afrontar (clase, charla, teatro,...) me coloco de pie, una ligera sonrisa, profundas respiraciones, con el estómago, el cuerpo suelto sin tensiones musculares, sólo los pies profundamente enraizados y me digo, ¡adelante!
Un saludo
Antonio "Alkantara" Zapatero

El medicamento al que se refiere Daroca es el propanolol (Sumial), un betabloqueante. Es la única medicación que no desaconsejo (lo cual no significa que la recomiende) para paliar los síntomas del miedo escénico, los nervios ante un examen o situaciones similares.

El Sumial (como todos los betabloqueantes) contrarresta los efectos de una secreción excesiva de adrenalina, fundamentalmente sus efectos estimulantes sobre el corazón.

Así, disminuyen la taquicardia (corazón acelerado), las palpitaciones (latidos fuertes), la subida de la tensión arterial, los temblores (de manos, piernas, cara, voz…) y el sudor frío. Todo ello sin afectar al cerebro: No rebajan el rendimiento intelectual, ni la memoria, ni los reflejos, ni la capacidad de conducir.

En definitiva, se alivian los síntomas del nerviosismo pero, al no afectar para nada al cerebro, no lo disminuyen. A pesar de ello, la persona se siente subjetivamente más tranquila. Al no verse temblar, ni tartamudear, ni sudar, tiende a relajarse con más facilidad, aumentando su autoconfianza. De manera que, indirectamente, sí tiene efectos sobre la estabilidad emocional.


Consejos para los que, bajo su responsabilidad, quieran o necesiten el apoyo del Sumial para actuar en público:

1 – Consulta primero con tu médico. Aunque son muy pocas las contraindicaciones, es posible que tú presentes alguna.

2 – No te estrenes el día de una actuación. Haz alguna prueba antes.

3 – Una pastilla de 40 mg tomada una hora antes de la actuación debería ser más que suficiente. Yo probaría con la mitad.

4 - Toma esta medicación con un poco de alimento.


Las contraindicaciones son muy pocas:

Alergia conocida al medicamento (Obvio, como todos los medicamentos)
Enfermedades cardiacas: Bloqueos, insuficiencia cardiaca, bradicardia. (No os los voy a explicar, que sería muy largo)
Antecedentes de asma, broncoespasmo o similar.
Tensión arterial baja. (Este se entiende bien, ¿no?)
Trastornos de la circulación arterial periférica (lo que la gente llama “trastornos del riego”)
Ayuno prolongado, bajadas de azúcar.



Desaconsejo cualquier otra clase de tratamiento farmacológico, principalmente los neurolépticos. Me refiero a las “pastillas para dormir”, “pastillas para los nervios”, tranquilizantes, relajantes o sedantes tipo Valium, Orfidal, Tranxilium, Trankimazin o similares. Por muchas razones. Una de ellas (y no precisamente la más importante) es que disminuyen de forma global las funciones intelectuales (atención, reflejos, memoria, etc.)

Y, por supuesto, desaconsejo con todas mis fuerzas a ese gran depresor del sistema nervioso central que es el alcohol.

Mágicos saludos.

Juan de Dios González Lillo. Licenciado en Medicina.

¡Ése es, Juandi! Sumial Ya pensé en que nos ayudarías cuando escribí el mensaje. Es una suerte contar con expertos en todas las ramas del saber. Un médico muy competente me lo contó, que se lo recomendaba a su hijo ante los exámenes... Dijo Sumial-10. A lo mejor para un grado de nervios más importante, hay que tomar más.

A mí también me espanta eso de los tranquilizantes, porque sedan, pero la civilización ha llegado a algo mucho más efectivo que la sedación: la supresión exacta de los nervios sin más efectos, y eso lo consiguen los betabloqueantes. Nunca he tomado uno pero me arrepiento de no haberlo hecho en algunas situaciones de mi vida, y conozco a gente que los ha tomado.

De todas formas, como dice Alkantara, hay que atender primero a los métodos de relajación y los psicológicos, por si con ellos bastara. A mí lo que más me quita los nervios en plan psicológico es:

1._HABER ENSAYADO MUCHO EL JUEGO, DE FORMA QUE NO TENGA MIEDO A TITUBEAR.
2._HABERLO PRESENTADO VARIAS VECES ANTE FAMILIARES Y AMIGOS, de modo que ya haya aprendido que me sale bien y tengo éxito, y así no imagine desastres que me pongan nervioso.
3._EMPEZAR CON JUEGOS COMPLETAMENTE AUTOMÁTICOS Y EN LOS QUE ME SIENTA ESPECIALMENTE CÓMODO, y cuando ya te has ganado al público y has demostrado que eres mago y ya has tenido éxito pase lo que pase a continuación, ya entonces puedes empezar a soltarte e intentar las virguerías que quieras, porque ya es más fácilmente perdonable un fallo, que no al principio. Pero como empieces con algo en donde temas que se te pueda descuadrar la carta o no hacer el movimiento adecuado y que se te vea o que se te caiga algo... pues es más fácil ponerte a temblar.

Me alegro de que Carlos y Ascanio sean también del club de Nerviosos anónimos , porque así veo que somos muchos. No pasa nada por ser así, es muy normal; hay que pelear un poquito más , pero no es ninguna vergüenza, somos muchos.

Os voy a comentar mi experiencia con los nervios. Yo me considero una persona nerviosa para ciertas cosas aunque no se me nota. Hoy por hoy lo que mas nervioso me pone es la magia. Ya sea de cerca o en escenario. El hecho de tener ensallados los juegos no va a hacer que te pongas menos nervioso creo yo, ya que pienso que eso va con la persona. Yo a un escenario solo he salido para hacer un número de manipulación (¿quien ha comentado que hay que hacer juegos automáticos? pa` chulo yo! ) que he repetido hasta la saciedad. He hecho números de manipulación en el bar donde nos reunimos los magos en alguna actuación alli por alguna ocasión especial y mas o menos podia controlar los nervios.

Mi última actuación fue en un pueblo donde fuimos varios magos de la Sociedad de ilusionismo de aqui. Yo salia el tercero y solo haría mi número de manipulación. Mientras esperaba que terminara el segundo que duró una media hora... yo estaba fatal. Además hacia calor y yo iba con la americana y las cargas, viendo que el no terminaba y yo queria salir ya. En algunos momentos mientras esperaba me llegó a entrar angustia y unos sudores... Para colmo no es nada fácil manipular con las manos bastante sudorosas (aunque era algo que ya habia previsto y practicado). Todo eso me paso antes de subir, una vez arriba, cuando empezo a sonar la música me puse el modo automático en el cuerpo y simplemente hice lo que habia hecho un trillón de veces en mi habitación. En ese momento no recuerdo tener nervios y si os digo la verdad casi no recuerdo nada de lo que pasó cuando estaba encima del escenario. Al final todo salio bastante bien, siempre se puede mejorar. Pero salí bastante contento. Lo mejor de ese dia no fue que mis compañeros me felicitaran o que a mis amigos les gustara, lo mejor fue que me atreví, le eche un par de bemoles y hice lo que todos los magos deberiamos hacer, enseñar lo que amamos.

Por esto a todos los que sufris nervios os animo a intentarlo. Mas vale fallar y volverlo a intentar que no hacerlo. Os lo digo porque otras veces no me habia atrevido a subir y la sensación que se te queda es peor que si todo hubiera sido un desastre.



Un saludo compañeros nerviosos!

Desde luego si yo hiciera manipulación tambien estaria muy nervioso por muy ensayado que lo tengas, pues todo depende de ti y de tus 10 dedos y supongo que el calor, el sudor, la humedad todo te debe influir en el numero y yo tambien me pondria muy nervioso. Pero como ya lo se ("dime cobarde" no hago un numero estrictamente de manipulacion aunque si manipulo objetos en mi sesion de magia,) Por eso admiro a todos los manipuladores sean quien sean y lo famoso que sean son como la parte mas dificil de la magia "tecnicamente hablando" Y es normal que uno se ponga angustiado cargado con 35 cargas en su cuerpo y saliendo a mano libre o es posible controlar los nervios si antes de tu numero alguien se pone hacer un numero de cumberlandismo....por ejemplo

Apreciados amigos,

Hace unos años debido a motivos profesionales tuve que realizar un curso sobre el miedo a hablar en público.
Posteriormente, al cabo de un tiempo lo adapté para una charla en la SEI de Barcelona. A continuación os adjunto un pequeño extracto de la citada charla por si puede resultar de vuestro interés:


COMO REDUCIR UN NERVIOSISMO EXAGERADO:

Conociendo el tema, mostrándose preparado (+recursos y + confianza)
Conociendo a la audiencia, o en su defecto, haciendo una valoración realista de su composición, características y expectativas (-sorpresas y nivel y tono del contenido han de estar en sintonía con la audiencia).
Teniendo los objetivos claros (dosificarlos. Se trata de que tu los domines a ellos y no ellos a ti).
Dominando el principio y el final (es con lo que más se queda la gente).
No teniendo prisa (acércate tranquilo y concentrado al lugar desde el que tengas que hablar y actuar. Siéntete instalado antes de comenzar. Deja un espacio entre frase y frase. Te entenderán mejor).
Preparando los medios auxiliares (material-compruébalo también. te dará confianza añadida).
Practicando (cuanto más practiques más seguro te sentirás. Aprovecha toda ocasión posible para hablar en público. Utiliza a tus amigos).
Pensar que el auditorio es tu enemigo no te ayudará. si te ayudará, en cambio, desarrollar tu confianza.

MIEDOS QUE TIENEN QUE SUPERARSE:

Antes que nada, el miedo al fracaso y a la sensación de inferioridad.
A no poder cumplir con las exigencias propias o de los demás.
A revelar que no poseemos los conocimientos suficiente.
A presentarnos ante personas desconocidas que nos intimidan, en un ambiente desconocido.
A la masa de público , que no es igual a la suma de los individuos que la componen.
Al público que "ataca" (toses distraidas, cuchicheos).
A sentir que nos están mirando.
Al "que les voy a decir" y al "como lo diré".
A la falta de experiencia.

EL DESARROLLO DE LA CONFIANZA:

Trabaja tu confianza.

Medios específicos:

Comprende las circunstancias relacionadas con tu temor.
Prepárate de forma adecuada.
Predispón tu mente para el éxito.
Actúa con confianza o aparenta tenerla.
¿Por qué tengo miedo? Por la falta de costumbre.
Preparación - no memorices, ensaya.
Predisposición al éxito - Date ánimos.

¡Notarás que el miedo desaparece pasados los 3 primeros minutos!

Comprender las circunstancias del temor:

No eres el único en sentir miedo al hablar y actuar en público. No te sientas inferior por ello. Cualquier persona del auditorio estaría igual de nerviosa en tus circunstancias.
Un poco de temor al auditorio es conveniente y, además nunca se pierde. Sólo que hay que saber como enfrentarse a él, darle cauce y superarlo.
Posiblemente la causa del miedo es que no estás acostumbrado, si tienes ocasión de practicar, pronto descubrirás que el grado de temor al auditorio pronto se verá reducido hasta el punto de que será para ti una ayuda y no un obstáculo.

Prepararse de forma adecuada:

Solamente el actuante preparado merece tener seguridad.
Organiza las ideas y hazlas tuyas. Busca sentimientos en tu interior y en tu experiencia, sucesos que puedas relacionar con la charla y el mensaje que pretendas transmitir (conseguirás expresar sinceridad y confianza).
Ensaya y no memorices (sólo ideas básicas).
Practicando y ensayando desarrollarás recursos que podrás utilizar en cualquier ocasión; es la única estrategia a largo plazo.

Predisponer tu mente para el éxito:

Intenta ser optimista, trata de convencerte de que todo va a salir bien y acude con una predisposición positiva.

Actúa con confianza o aparenta tenerla.

Ya sabes que si actúas como si no tuvieras miedo, dejarás de tenerlo.

Cordialmente,

Xavi Soler

Cada vez que me pongo a hacer magia tiemblo tanto y me pongo tan nervioso que me bloqueo totalmente y soy incapaz de hacer nada.
Sin embargo, mis personajes (tanto el mago torpe como el elfo) no sienten apuro, nervios ni tienen ningún problema frente al público.

En cuanto entro en el personaje...se acabó el problema.

Basta con oir los primeros compases de la sintonía de entrada para que se acaben los problemas.

¿Tiene esto sentido para vosotros?

Estoy totalmente con Alkantara, para los nervios lo mejor es una Tila (esto creo que es más psicologico que otra cosa) y respirar.

Hablo no solo en Magia ya que en este campo mi experiencia no es mucha, sino en cualquier otra situación por ejemplo dar cursos los nervios me surgen sobre todo al principio y se me van quitando según veo que la gente empieza a estar receptiva, si como en alguno no les veo receptivo me entra el nervio por que pienso que lo estoy realizando mal.

Lo que he comprobado es que los nervios surgen, al menos a mi, en no defraudar y en magia se junta un problema más que es si lo hago mal no es suficiente con que le den otro curso sino que le chafo el juego posiblemente de por vida.

Vuelvo a estar deacurdo con Alkantara en el sentido que medicinas o alcohol creo que podrán bloquear mis nervios pero también mermaran mis sentidos y es posible que este realizano algo mal sin saberlo.