Cosas que no tienen relación directa con nuestro arte, off-topic
#166111 por Daroca
27 Jul 2013, 22:54



Discurso del Papa a las clases dirigentes: "Rehabilitar la política, atención prioritaria a la pobreza y diálogo, diálogo y diálogo!

Excelencias,
Señoras y señores.

Doy gracias a Dios por la oportunidad de encontrar a una representación tan distinguida y cualificada de responsables políticos y diplomáticos, culturales y religiosos, académicos y empresariales de este inmenso Brasil.

Hubiera deseado hablarles en su hermosa lengua portuguesa, pero para poder expresar mejor lo que llevo en el corazón, prefiero hablar en español. Les pido la cortesía de disculparme.

Saludo cordialmente a todos y les expreso mi reconocimiento. Agradezco a Monseñor Orani y al Señor Walmyr Júnior, sus amables palabras de bienvenida y presentación y de testimonio. Veo en ustedes la memoria y la esperanza: la memoria del camino, de la conciencia de su patria, y la esperanza de que esta patria abierta a la luz que emana del Evangelio, continúe desarrollándose en el pleno respeto de los principios éticos basados en la dignidad trascendente de la persona.

Memoria del pasado y utopia hacia el futuro se encuentran en el presente que no es una coyuntura sin historia, y sin promesa, sino un momento en el tiempo, un desafio para recoger sabiduría y saber proyectarla.

Quien tiene un papel de responsabilidad en una nación está llamado a afrontar el futuro «con la mirada tranquila de quien sabe ver la verdad», como decía el pensador brasileño Alceu Amoroso Lima («Nosso tempo», en A vida sobrenatural e o mondo moderno, Río de Janeiro 1956, 106). Quisiera compartir con ustedes tres aspectos de esta mirada calma, serena y sabia: primero, la originalidad de una tradición cultural; segundo, la responsabilidad solidaria para construir el futuro y, tercero, el diálogo constructivo para afrontar el presente.

1. En primer lugar, es de justicia valorar la originalidad dinámica que caracteriza a la cultura brasileña, con su extraordinaria capacidad para integrar elementos diversos. El común sentir de un pueblo, las bases de su pensamiento y de su creatividad, los principios básicos de su vida, los criterios de juicio sobre las prioridades, las normas de actuación, se fundan, se fusionan y crecen en una visión integral de la persona humana.

Esta visión del hombre y de la vida característica del pueblo brasileño ha recibido también la savia del Evangelio: la fe en Jesucristo, el amor de Dios y la fraternidad con el prójimo. La riqueza de esta savia puede fecundar un proceso cultural fiel a la identidad brasileña y a la vez un proceso constructor de un futuro mejor para todos. Un proceso que hacer crecer la humanización integral y la cultura del encuentro y de la relación, esta es la manera cristiana de promover el bien común, la alegría de vivir. Y aquí convergen la fe y la razón, la dimensión religiosa con los diferentes aspectos de la cultura humana: el arte, la ciencia, el trabajo, la literatura... El cristianismo combina trascendencia y encarnación; por la capacidad de revitalizar siempre el pensamiento y la vida ante la amenaza de frustración y desencanto que pueden invadir el corazón y propagarse por las calles.

2. Un segundo punto al que quisiera referirme es la responsabilidad social. Esta requiere un cierto tipo de paradigma cultural y, en consecuencia, de la política. Somos responsables de la formación de las nuevas generaciones, ayudarlos a ser capaces en la economía y en la política, y firmes en los valores éticos. El futuro exige hoy la tarea de rehabilitar la política, rehabilitar la politica, que es una de las formas más altas de la caridad. El futuro nos exige también una visión humanista de la economía y una política que logre cada vez más y mejor la participación de las personas, evite el elitismo y erradique la pobreza.

Que a nadie le falte lo necesario y que se asegure a todos dignidad, fraternidad y solidaridad: éste es el camino propuesto. Ya en la época del profeta Amós era muy frecuente la admonición de Dios: «Venden al justo por dinero, al pobre por un par de sandalias. Oprimen contra el polvo la cabeza de los míseros y tuercen el camino de los indigentes» (Am. 2,6-7). Los gritos que piden justicia continúan todavía hoy.


Quien desempeña un papel de guía --permitame que diga aquel a quien la vida ha ungido como guía--, ha de tener objetivos concretos y buscar los medios específicos para alcanzarlos, pero también puede existir el peligro de la desilusión, la amargura, la indiferencia, cuando las expectativas no se cumplen. Aquí apelo a la dinamica de la esperanza que nos impulsa a ir siempre más allá, a emplear todas las energías y capacidades en favor de las personas para las que se trabaja, aceptando los resultados y creando condiciones para descubrir nuevos caminos, entregándose incluso sin ver los resultados, pero manteniendo viva la esperanza. Con esa constancia y coraje que nacen de la aceptación de la propia vocación de guía, de dirigente.

Es propio de la dirigencia elegir la más justa de las opciones después de haberlas considerado, a partir de la propia responsabilidad y el interés del bien común; por este camino se va al centro de los males de una sociedad para superarlos con audacia de acciones valientes y libres. Es nuestra responsabilidad, aunque siempre sea limitada, esa comprension de la totalidad de la realidad, observando, sopesando, valorando, para tomar decisiones en el momento presente, pero extendiendo la mirada hacia el futuro, reflexionando sobre las consecuencias de las decisiones.

Quien actúa responsablemente pone la propia actividad ante los derechos de los demás y ante el juicio de Dios. Este sentido ético aparece hoy como un desafío histórico sin precedentes. Tenemos que buscarlo, tenemos que inserirlo en la misma sociedad. Además de la racionalidad científica y técnica, en la situación actual se impone la vinculación moral con una responsabilidad social y profundamente solidaria.

3. Para completar esta reflexión, además del humanismo integral que respete la cultura original y la responsabilidad solidaria, considero fundamental para afrontar el presente: el diálogo constructivo. Entre la indiferencia egoísta y la protesta violenta, siempre hay una opción posible: el diálogo. El diálogo entre las generaciones, el diálogo en el pueblo, porque todos somos pueblo, la capacidad de dar y recibir, permaneciendo abiertos a la verdad. Un país crece cuando sus diversas riquezas culturales dialogan de manera constructiva: la cultura popular, la universitaria, la juvenil, la artística, la tecnológica, la cultura económica, la cultura de la familia y de los medios de comunicación. ¡Cuánto diálogo hay! Es imposible imaginar un futuro para la sociedad sin una incisiva contribución de energías morales en una democracia que se quede encerrada en la pura lógica o en el mero equilibrio de la representación de los intereses establecidos. Considero también fundamental en este diálogo la contribución de las grandes tradiciones religiosas, que desempeñan un papel fecundo de fermento en la vida social y de animación de la democracia. La convivencia pacífica entre las diferentes religiones se ve beneficiada por la laicidad del Estado, que, sin asumir como propia ninguna posición confesional, respeta y valora la presencia de la dimensión religiosa en la sociedad, favoreciendo sus expresiones más concretas.

Cuando los líderes de los diferentes sectores me piden un consejo, mi respuesta siempre es la misma: Diálogo, diálogo, diálogo. El único modo de que una persona, una familia, una sociedad, crezca; la única manera de que la vida de los pueblos avance, es la cultura del encuentro, una cultura en la que todo el mundo tiene algo bueno que aportar, y todos pueden recibir algo bueno en cambio. El otro siempre tiene algo que darme cuando sabemos acercarnos a él con actitud abierta y disponible, sin prejuicios. Esta actitud abierta, disponible y sin prejucios yo la definiria como «humildad social», que es la que favorece el diálogo. Solo así puede prosperar un buen entendimiento entre las culturas y las religiones, la estima de unas por las otras sin opiniones previas gratuitas y en clima de respeto de los derechos de cada una. Hoy, o se apuesta por el dialogo, o se apuesta por la cultura del encuentro, o todos perdemos, todos perdemos; por aquí va el camino fecundo.


Excelencias,
Señoras y señores.
Gracias por su atención. Tomen estas palabras como expresión de mi preocupación como Pastor de Iglesia y del respeto y afecto que tengo por el pueblo brasileño. La hermandad entre los hombres y la colaboración para construir una sociedad más justa no son un sueño fantasioso, sino el resultado de un esfuerzo concertado de todos hacia el bien común. Los aliento en este su compromiso por el bien común, que requiere por parte de todos sabiduría, prudencia y generosidad. Los encomiendo al Padre celestial pidiéndole, por la intercesión de Nuestra Señora de Aparecida, que colme con sus dones a cada uno de los presentes, a sus familias, comunidades humanas y de trabajo, y de corazón pido a Dios que los bendiga. Muchas gracias.








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#166120 por Daroca
28 Jul 2013, 03:16


Palabras del Papa en la Vigilia: ¡ORACIÓN, SACRAMENTOS Y AYUDAR A LOS DEMÁS!

En un discurso como este es mejor no poner el texto y escucharlo de viva voz. Al principio habla en portugués y está el sonido bajo, pero luego ya habla en español y se oye muy bien.



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#166124 por Daroca
28 Jul 2013, 12:04
Voluntarios de JMJ animan a jóvenes a donar sacos de dormir a indigentes en Río

RÍO DE JANEIRO, 27 Jul. 13 / 06:54 pm (ACI).- Un grupo de voluntarios de la Jornada Mundial de la Juventud (JMJ) está animando a los jóvenes para que, una vez terminado este encuentro mundial, donen sus sacos de dormir a los indigentes en Río de Janeiro como una respuesta concreta al llamado del Papa Francisco a la solidaridad.

Los voluntarios, que tienen un blog llamado "Contá con nosotros", esperan que los millones de jóvenes que están en Rio para la JMJ donen sus sacos de dormir en vez de llevarlos nuevamente a casa.

"Es importante porque es una respuesta concreta que podemos comenzar a poner por obra, desde este momento, a lo que el Papa Francisco nos ha estado diciendo estos días", dijo a ACI Prensa Inés San Martín este 27 de julio.

"Durante una semana hemos interrumpido a los indigentes con nuestros cantos de vuelta a casa. Darles el saco es la excusa perfecta para acercarnos y explicarles por qué", dijo.

"Lo que suele suceder es que los peregrinos regresan con sus sacos de dormir y los guardan por otros dos o tres años, ya no los usan y ahora con esta idea definitivamente van a ser usados", indicó San Martín.

El Papa Francisco ha repetido, en distintas ocasiones durante esta JMJ, su llamado a construir la solidaridad. Concretamente, lo ha hecho entre otras ocasiones en la Misa en la Catedral de Río esta mañana, en el encuentro con los líderes de la sociedad civil en el teatro municipal y de especialmente en la Vigilia de esta noche que aún se desarrolla en la playa de Copacabana





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La historia del joven en silla de ruedas que sobrecogió a 3 millones en Copacabana

El joven brasileño Felipe Passos conmovió a los cerca de tres millones de participantes de la Jornada Mundial de la Juventud, incluyendo al mismo Papa Francisco, cuando relató durante la Vigilia en la playa de Copacabana, la historia que lo llevó a una silla de ruedas y a descubrir el valor de la Cruz en la vida del cristiano.

Felipe, de 23 años, explicó que su historia comenzó al final de la pasada Jornada Mundial de la Juventud en Madrid, donde se había comprometido espiritualmente a guardar la castidad hasta el matrimonio y a trabajar intensamente para que su grupo de oración de su natal ciudad de Ponta Grossa, en el estado de Paraná, pudiera participar en la Jornada Mundial de la Juventud, que el Papa Benedicto anunció para Rio de Janeiro.

De modestos recursos, Felipe y sus amigos comenzaron a juntar fondos mediante múltiples y sacrificados trabajos, al tiempo que se preparaban espiritualmente, orando, participando en adoraciones eucarísticas, ayunando y realizando obras de solidaridad.

“Pero el mes de enero de este año, dos días antes de cumplir los 23 años, dos jóvenes entraron en mi casa, armados, con la intención de robar el dinero que habíamos juntado con tanto sacrificio”.

“Pensé en los meses de esfuerzo, de sacrificio de mi familia, de mis amigos y compañeros… en lo que nos sería arrebatado y decidí que no lo daría”.

Felipe salvó los ahorros del grupo, pero recibió un disparo que casi termina con su vida. “Estuve clínicamente muerto, tuve varios paros cardiacos, y el médico dijo a mis padres en el hospital ‘este joven no tiene esperanzas’… pero aquí estoy, y mi comunidad está aquí por la misericordia de Dios".

El joven paranaense, ante la multitud enmudecida y un Papa Francisco que lo miraba atentamente, relató cómo estuvo en coma, respirando por un tubo, mientras su comunidad ofrecía oraciones y sacrificios por su recuperación.

Finalmente, cuando recuperó la conciencia, lo primero que hizo fue pedir la Eucaristía; y tras recibirla, su recuperación se aceleró.

Sin embargo, Felipe quedó confinado a una silla de ruedas: “esta es mi cruz, la cruz que me envió el Señor para acercarme más a Él, para vivir más abierto a su gracia y su amor”, explicó.

Cuando la multitud irrumpió en un aplauso, Felipe interrumpió: “¡Silencio! ¡Escuchemos al Espíritu Santo!”.

El joven de 23 años pidió luego a cada uno de los presentes tomar en sus manos y dirigir la mirada a la cruz del peregrino que cada uno llevaba en su pecho, y los invitó a meditar en silencio sobre “cuál es la cruz que el Señor me ha dado, cuál es la cruz que él quiere que lleve por su amor”.

El momento de oración y meditación ante la cruz fue seguido por todos los presentes, incluyendo los obispos y cardenales, que contemplaron su propia cruz pectoral, y creó un raro momento de profundo silencio a todo lo largo de la playa de Copacabana.

Felipe concluyó su testimonio pidiendo oraciones y la bendición del Papa Francisco.







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#166128 por Daroca
28 Jul 2013, 18:09
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Homilía del Papa Francisco en Misa de Envío de la JMJ Río 2013: "VAYAN, SIN MIEDO, PARA SERVIR"


RÍO DE JANEIRO, 28 Jul. 13 / 08:58 am (ACI).- Queridos hermanos en el episcopado y en el sacerdocio,

Queridos jóvenes

«Vayan y hagan discípulos a todos los pueblos». Con estas palabras, Jesús se dirige a cada uno de ustedes diciendo: «Qué bonito ha sido participar en la Jornada Mundial de la Juventud, vivir la fe junto a jóvenes venidos de los cuatro ángulos de la tierra, pero ahora tú debes ir y transmitir esta experiencia a los demás».

Jesús te llama a ser discípulo en misión. A la luz de la palabra de Dios que hemos escuchado, ¿qué nos dice hoy el Señor? Tres palabras: Vayan, sin miedo, para servir.


1. Vayan. En estos días aquí en Río, han podido experimentar la belleza de encontrar a Jesús y de encontrarlo juntos, han sentido la alegría de la fe. Pero la experiencia de este encuentro no puede quedar encerrada en su vida o en el pequeño grupo de la parroquia, del movimiento o de su comunidad. Sería como quitarle el oxígeno a una llama que arde.

La fe es una llama que se hace más viva cuanto más se comparte, se transmite, para que todos conozcan, amen y profesen a Jesucristo,
que es el Señor de la vida y de la historia (cf. Rm 10,9).

Pero ¡cuidado! Jesús no ha dicho: si quieren, si tienen tiempo, sino: «Vayan y hagan discípulos a todos los pueblos». Compartir la experiencia de la fe, dar testimonio de la fe, anunciar el evangelio es el mandato que el Señor confía a toda la Iglesia, también a ti; es un mandato que no nace de la voluntad de dominio o de poder, sino de la fuerza del amor, del hecho que Jesús ha venido antes a nosotros y nos ha dado, no algo de sí, sino todo él, ha dado su vida para salvarnos y mostrarnos el amor y la misericordia de Dios.

Jesús no nos trata como a esclavos, sino como a hombres libres, amigos, hermanos; y no sólo nos envía, sino que nos acompaña, está siempre a nuestro lado en esta misión de amor.

¿Adónde nos envía Jesús? No hay fronteras, no hay límites: nos envía a todos. El evangelio no es para algunos sino para todos. No es sólo para los que nos parecen más cercanos, más receptivos, más acogedores. Es para todos. No tengan miedo de ir y llevar a Cristo a cualquier ambiente, hasta las periferias existenciales, también a quien parece más lejano, más indiferente.

El Señor busca a todos, quiere que todos sientan el calor de su misericordia y de su amor.

En particular, quisiera que este mandato de Cristo: «Vayan», resonara en ustedes jóvenes de la Iglesia en América Latina, comprometidos en la misión continental promovida por los obispos. Brasil, América Latina, el mundo tiene necesidad de Cristo.

San Pablo dice: «¡Ay de mí si no anuncio el evangelio!» (1 Co 9,16). Este continente ha recibido el anuncio del evangelio, que ha marcado su camino y ha dado mucho fruto. Ahora este anuncio se os ha confiado también a ustedes, para que resuene con renovada fuerza.

La Iglesia necesita de ustedes, del entusiasmo, la creatividad y la alegría que les caracteriza. Un gran apóstol de Brasil, el beato José de Anchieta, se marchó a misionar cuando tenía sólo diecinueve años. ¿Saben cuál es el mejor medio para evangelizar a los jóvenes? Otro joven. Éste es el camino que hay que recorrer.

2. Sin miedo. Puede que alguno piense: «No tengo ninguna preparación especial, ¿cómo puedo ir y anunciar el evangelio?». Querido amigo, tu miedo no se diferencia mucho del de Jeremías, un joven como ustedes, cuando fue llamado por Dios para ser profeta.

Recién hemos escuchado sus palabras: «¡Ay, Señor, Dios mío! Mira que no sé hablar, que sólo soy un niño». También Dios dice a ustedes lo que dijo a Jeremías: «No les tengas miedo, que yo estoy contigo para librarte» (Jr 1,6.8). Él está con nosotros.

«No tengan miedo». Cuando vamos a anunciar a Cristo, es él mismo el que va por delante y nos guía. Al enviar a sus discípulos en misión, ha prometido: «Yo estoy con ustedes todos los días» (Mt 28,20). Y esto es verdad también para nosotros. Jesús no nos deja solos, nunca les deja solos. Les acompaña siempre.

Además Jesús no ha dicho: «Ve», sino «Vayan»: somos enviados juntos. Queridos jóvenes, sientan la compañía de toda la Iglesia, y también la comunión de los santos, en esta misión. Cuando juntos hacemos frente a los desafíos, entonces somos fuertes, descubrimos recursos que pensábamos que no teníamos. Jesús no ha llamado a los apóstoles a vivir aislados, los ha llamado a formar un grupo, una comunidad.

Quisiera dirigirme también a ustedes, queridos sacerdotes que concelebran conmigo en esta eucaristía: han venido para acompañar a sus jóvenes, y es bonito compartir esta experiencia de fe. Pero es una etapa en el camino. Sigan acompañándolos con generosidad y alegría, ayúdenlos a comprometerse activamente en la Iglesia; que nunca se sientan solos.

3. La última palabra: para servir. Al comienzo del salmo que hemos proclamado están estas palabras: «Canten al Señor un cántico nuevo» (95,1).

¿Cuál es este cántico nuevo? No son palabras, no es una melodía, sino que es el canto de su vida, es dejar que nuestra vida se identifique con la de Jesús, es tener sus sentimientos, sus pensamientos, sus acciones. Y la vida de Jesús es una vida para los demás. Es una vida de servicio.

San Pablo, en la lectura que hemos escuchado hace poco, decía: «Me he hecho esclavo de todos para ganar a los más posibles» (1 Co 9,19). Para anunciar a Jesús, Pablo se ha hecho «esclavo de todos».

Evangelizar es dar testimonio en primera persona del amor de Dios, es superar nuestros egoísmos, es servir inclinándose a lavar los pies de nuestros hermanos como hizo Jesús.

Vayan, sin miedo, para servir. Siguiendo estas tres palabras experimentarán que quien evangeliza es evangelizado, quien transmite la alegría de la fe, recibe alegría. Queridos jóvenes, cuando vuelvan a sus casas, no tengan miedo de ser generosos con Cristo, de dar testimonio del evangelio.

En la primera lectura, cuando Dios envía al profeta Jeremías, le da el poder para «arrancar y arrasar, para destruir y demoler, para reedificar y plantar» (Jr 1,10). También es así para ustedes. Llevar el evangelio es llevar la fuerza de Dios para arrancar y arrasar el mal y la violencia; para destruir y demoler las barreras del egoísmo, la intolerancia y el odio; para edificar un mundo nuevo. Jesucristo cuenta con ustedes. La Iglesia cuenta con ustedes.

El Papa cuenta con ustedes. Que María, Madre de Jesús y Madre nuestra, les acompañe siempre con su ternura: «Vayan y hagan discípulos a todos los pueblos». Amén
.



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#166132 por Daroca
28 Jul 2013, 20:10
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Más fotos de la Vigilia de anoche, en este enlace. ¡3 millones de asistentes!
http://www.abc.es/fotos-religion/201307 ... elemento=1




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Con la mochila cargada de compromiso
Termina la JMJ. Los chicos vuelven a casa en las próximas horas. La sensación que queda es de plenitud
28.07.2013 Gilberto Hernández García

Termina la JMJ. Los chicos vuelven a casa en las próximas horas. La sensación que queda es de plenitud en el espíritu, como me ha referido un amigo: “Verdaderamente la Jornada es una experiencia de conversión”. Y me relata con toda su carga emotiva cada una de las actividades en las que pudo participar como peregrino. No cabe duda que el Espíritu de Dios sigue “haciendo nuevas todas las cosas”.

Yo me quedo, como periodista y como seguidor de Jesucristo en esta amada Iglesia nuestra, con un grato sabor de boca, con el corazón henchido de gozo; aunque el vértigo de la noticia, el afán de compartir lo más pronto posible lo que estaba pasando en Río, a veces no me permitió digerir en su totalidad y en toda su sustancia todos los momentos que se sucedían, uno tras otro, en la JMJ. La tarea de todos será ir serenando y gustando en todas sus partes, los mensajes de Francisco, que, aunque dirigidos principalmente a los jóvenes, tocan la vida de todos sin importar la edad.

Se ha dicho que la JMJ rebasó con mucho todas las previsiones. Y no se refiero sólo a la enorme cantidad de jóvenes, y adultos “colados” en la fiesta”, que en número de más de tres millones, abarrotó la ciudad de Río de Janeiro; o a las travesuras que la lluvia, el viento y el frío hicieron en estos días; se habla del enorme dinamismo que mostro el Papa, de la sencillez de sus palabras y de la manera directa que tuvo para confirmar en la fe a sus hermanos más jóvenes.

Habló de licuados y de futbol; de modas y de retos; de tomar un cafecito y del clima; de líos y no echarse para atrás; pero siempre del Evangelio, de la presencia de Dios en medio de las realidades de la vida. Con cada una de sus palabras fuimos entendiendo eso de la “novedad del Evangelio”. Cosas ya dichas, ya escuchadas más de una vez, ya sabidas tal vez, pero que ahora tenían como un nuevo significado. Más de una ocasión me llevé las manos a la cabeza mientras leía los discursos o miraba la transmisión, para decirme: “¡Pero, claro! Así son las cosas, así deberían ser”.

Se supone que el periodista no debe involucrarse emocionalmente con las fuentes que cubre, con los acontecimientos que relata, so pena de perder objetividad; sin embargo ha sido muy difícil sustraerse de este ambiente jovial y cargado de fe, que invita a renovar la vida, a asumir cada una de las dimensiones de la propia existencia en clave Reino, ese que anunció Jesús y que el Papa Francisco en estos días nos trajo al primer plano.

Se termina la JMJ. Los sentimientos se cruzan. Muchos jóvenes ya reacomodan sus mochilas para emprender el retorno. Pero esas mochilas, creo yo, permítanme la metáfora, aún con todo su desorden propio de sus dueños, van ahora cargadas de reflexiones, compromiso, tareas pendientes que por sí mismo urgirán a cada uno a realizarlas. El Papa ha sido claro: “Hay que sudar la camiseta”, como dijo en la vigilia. No hay que distraerse, porque el que lo hace se pierde y juega en otro partido.

Uno de los símbolos que más me han llamado la atención durante la Jornada, fue cuando en la Vigilia unos jóvenes construyeron (o reconstruyeron) una iglesia. Fue un esfuerzo enorme el que hicieron, sin embargo, poco tiempo después ellos mismos se encargaron de desmantelarla, ¿por qué? Porque es parte de la misión: ir a las comunidades de origen y edificar la parte que toca de esta gran familia que es la de los hijos de Dios.

Esa es la parte con la que yo me quedo: desde mi profesión de periodista y mi vocación de seguidor de Cristo, me siento impulsado a seguir colaborando por estos medios a difundir las buenas nuevas del amor de Dios. Ha sido una hermosa oportunidad para estar cerca del “corazón del mundo”, que fue la JMJ de Río
#166140 por Daroca
29 Jul 2013, 01:43
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El otro día subimos esta noticia de un niño de nueve años que había hecho llorar al Papa. ¿Qué le dijo? No sabíamos nada.
Ahora, han podido preguntarle al niño y ya lo sabemos.

"Santidad, quiero ser sacerdote de Cristo, un representante de Cristo", dijo el niño, mientras lloraba de la emoción. Conmovido por sus palabras, el Papa Francisco le respondió: "Voy a rezar por ti, pero te pido que reces por mí. A partir de hoy, tu vocación se concretó".


#166141 por Daroca
29 Jul 2013, 03:30
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Palabras del Papa Francisco a los Voluntarios de las JMJ 2013

RIO DE JANEIRO, 28 Jul. 13 / 04:01 pm (ACI).- Queridos voluntarios

Buenas tardes.

No podía regresar a Roma sin haberles dado las gracias personal y afectuosamente a cada uno de ustedes por el trabajo y la dedicación con que han acompañado, ayudado, servido a los miles de jóvenes peregrinos; por tantos pequeños gestos que han hecho de esta Jornada Mundial de la Juventud una experiencia inolvidable de fe. Con la sonrisa de cada uno de ustedes, con su amabilidad, con su disponibilidad para el servicio, han demostrado que "hay más dicha en dar que en recibir" (Hch 20,35).

El servicio que han prestado en estos días me ha recordado la misión de san Juan Bautista, que preparó el camino a Jesús. Cada uno de ustedes, a su manera, ha sido un medio que ha facilitado a miles de jóvenes tener "preparado el camino" para encontrar a Jesús. Y éste es el servicio más bonito que podemos realizar como discípulos misioneros: Preparar el camino para que todos puedan conocer, encontrar y amar al Señor. A ustedes, que en este período han respondido con tanta diligencia y solicitud a la llamada para ser voluntarios de la Jornada Mundial de la Juventud, les quisiera decir: Sean siempre generosos con Dios y con los otros. No se pierde nada, y en cambio, es grande la riqueza de vida que se recibe.

Dios llama a opciones definitivas, tiene un proyecto para cada uno: descubrirlo, responder a la propia vocación, es caminar hacia la realización feliz de uno mismo. Dios nos llama a todos a la santidad, a vivir su vida, pero tiene un camino para cada uno. Algunos son llamados a santificarse construyendo una familia mediante el sacramento del matrimonio.

Hay quien dice que hoy el matrimonio está "pasado de moda"; ¿Está fuera de moda?, en la cultura de lo provisional, de lo relativo, muchos predican que lo importante es "disfrutar" el momento, que no vale la pena comprometerse para toda la vida, hacer opciones definitivas, "para siempre", porque no se sabe lo que pasará mañana. Yo, en cambio, les pido que sean revolucionarios, que vayan contracorriente; sí, en esto les pido que se rebelen contra esta cultura de lo provisional, que, en el fondo, cree que ustedes no son capaces de asumir responsabilidades, que no son capaces de amar verdaderamente. Yo tengo confianza en ustedes, jóvenes, y pido por ustedes. Atrévanse a "ir contracorriente". También tenga la valentía a ser felices.

El Señor llama a algunos al sacerdocio, a entregarse totalmente a Él, para amar a todos con el corazón del Buen Pastor. A otros los llama a servir a los demás en la vida religiosa: en los monasterios, dedicándose a la oración por el bien del mundo, en los diversos sectores del apostolado, gastándose por todos, especialmente por los más necesitados. Nunca olvidaré aquel 21 de septiembre –tenía 17 años- cuando, después de haber entrado en la iglesia de San José de Flores para confesarme, sentí por primera vez que Dios me llamaba. ¡No tengan miedo a lo que Dios pide! Vale la pena decir "sí" a Dios. ¡En Él está la alegría!

Queridos jóvenes, quizá alguno no tiene todavía claro qué hará con su vida. Pídanselo al Señor; Él les hará ver el camino. Como hizo el joven Samuel, que escuchó dentro de sí la voz insistente del Señor que lo llamaba pero no entendía, no sabía qué decir y, con la ayuda del sacerdote Elí, al final respondió a aquella voz: Habla, Señor, que yo te escucho (cf. 1 S 3,1-10). Pidan también al Señor: ¿Qué quieres que haga? ¿Qué camino he de seguir?

Queridos amigos, de nuevo les doy las gracias por lo que han hecho en estos días. Les agradezco a la pastoral, a los nuevas pastorales que pusieron a sus miembros al servicio de esta jornada. No olviden lo que han vivido aquí. Cuenten siempre con mis oraciones y estoy seguro de que yo puedo contar con las de ustedes.

Recemos con amor y confianza a la santa Madre de Dios.

Una última cosa recen por mi!








Último mensaje del Papa Francisco en Brasil JMJ 2013

RIO DE JANEIRO, 28 Jul. 13 / 05:08 pm (ACI).- Señora Presidenta de la República,
Distinguidas Autoridades nacionales, estatales y locales,
Querido Arzobispo de San Sebastián de Río de Janeiro,
Venerados Cardenales y Hermanos en el Episcopado,
Queridos amigos

En breves instantes dejaré su Patria para regresar a Roma. Marcho con el alma llena de recuerdos felices; y éstos –estoy seguro- se convertirán en oración. En este momento comienzo a sentir un inicio de nostalgia. Saudade de Brasil, este pueblo tan grande y de gran corazón; este pueblo tan amigable. Nostalgia de la sonrisa abierta y sincera que he visto en tantas personas, nostalgia del entusiasmo de los voluntarios. Nostalgia de la esperanza en los ojos de los jóvenes del Hospital San Francisco. Nostalgia de la fe y de la alegría en medio a la adversidad de los residentes en Varghina. Tengo la certeza de que Cristo vive y está realmente presente en el quehacer de innumerables jóvenes y de tantas personas con las que me he encontrado en esta semana inolvidable. Gracias por la acogida y la calidez de la amistad que me han demostrado. También de esto comienzo a sentir saudade.

Doy las gracias a la Señora Presidenta por haberse hecho intérprete de los sentimientos de todo el pueblo de Brasil hacia el Sucesor de Pedro. Agradezco cordialmente a mis hermanos Obispos y a sus numerosos colaboradores que hayan hecho de estos días una estupenda celebración de nuestra fecunda y gozosa fe en Jesucristo. Doy las gracias a todos los que han participado en las celebraciones de la eucaristía y en los demás actos, a quienes los han organizado, a cuantos han trabajo para difundirlos a través de los medios de comunicación. Doy gracias, en fin, a todas las personas que de un modo u otro han sabido responder a las exigencias de la acogida y organización de una inmensa multitud de jóvenes, y por último, pero no menos importante, a tantos que, muchas veces en silencio y con sencillez, han rezado para que esta Jornada Mundial de la Juventud fuese una verdadera experiencia de crecimiento en la fe. Que Dios recompense a todos, como sólo Él sabe hacer.

En este clima de agradecimiento y de saudade, pienso en los jóvenes, protagonistas de este gran encuentro: Dios los bendiga por este testimonio tan bello de participación viva, profunda y festiva en estos días. Muchos de ustedes han venido a esta peregrinación como discípulos; no tengo ninguna duda de que todos marchan como misioneros. Con su testimonio de alegría y de servicio, ustedes hacen florecer la civilización del amor.

Demuestran con la vida que vale la pena gastarse por grandes ideales, valorar la dignidad de cada ser humano, y apostar por Cristo y su Evangelio. A Él es a quien hemos venido a buscar en estos días, porque Él nos ha buscado antes, nos ha enardecido el corazón para proclamar la Buena Noticia, en las grandes ciudades y en las pequeños poblaciones, en el campo y en todos los lugares de este vasto mundo nuestro. Yo seguiré alimentando una esperanza inmensa en los jóvenes de Brasil y del mundo entero: por medio de ellos, Cristo está preparando una nueva primavera en todo el mundo. Yo he visto los primeros resultados de esta siembra, otros gozarán con la abundante cosecha.

Mi último pensamiento, mi última expresión de saudade, se dirige a Nuestra Señora de Aparecida. En aquel amado Santuario me he arrodillado para pedir por la humanidad entera y en particular por todos los brasileños. He pedido a María que refuerce en ustedes la fe cristiana, que forma parte del alma noble de Brasil, como de tantos otros países, tesoro de su cultura, voluntad y fuerza para construir una nueva humanidad en la concordia y en la solidaridad.

El Papa se va, les dice "hasta pronto", un "pronto" ya muy nostálgico (saudadoso) y les pide, por favor, que no se olviden de rezar por él. El Papa necesita la oración de todos ustedes. Un abrazo a todos. Que Dios les bendiga.





Y estas palabras dedicadas a los obispos sobre cómo tienen que dirigir sus diócesis son para mí de lo mejor. Es largo pero es increíble.





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#166152 por Daroca
29 Jul 2013, 19:45
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Entrevista al Papa en el avión por un grupo de periodistas.

VATICANO, 29 Jul. 13 / 11:01 am (ACI).-

El Papa Francisco sorprendió hace unas horas a las decenas de periodistas que lo acompañaron en el vuelo de regreso a Roma, al improvisar una rueda de prensa. Sus respuestas ya comenzaron a dar la vuelta al mundo y las tergiversaciones también. Compartimos la transcripción que hizo el diario español El Mundo.

Transcripción de las respuestas del Papa en el avión / Diario El Mundo:

Buenas tardes. Muchas gracias. Estoy contento. Ha sido un viaje hermoso. Espiritualmente me ha hecho bien. Estoy bastante cansado, pero con el corazón alegre. Me ha hecho bien. Encontrarte la gente te hace bien porque el Señor trabaja en cada uno de nosotros. Trabaja en el corazón. La riqueza del Señor es tanta que siempre podemos recibir tantas cosas hermosas de los otros. Esto me hace bien a mí. Como primer balance.

Luego, la bondad y el corazón del pueblo brasileño es grande. Es un pueblo amable, que ama la fiesta, que en el sufrimiento siempre encuentra un camino para buscar el bien en alguna parte. Esto hace bien. Un pueblo alegre. Un pueblo que ha sufrido tanto. Es contagiosa la alegría de los brasileños. Tiene un gran corazón este pueblo.

Luego, los organizadores, tanto de nuestra parte como de los brasileños... me he sentido que estaba delante de un ordenador. La encarnación del ordenador [señala a Gasbarri]. De verdad, estaba todo cronometrado. Luego hemos tenido problemas con la hipótesis de la seguridad. La seguridad por allí y por aquí. No ha habido ni un incidente en todo Río de Janeiro en estos días.

Todo era espontáneo. Con menos seguridad yo he podido ir con la gente, abrazarles, saludarles, sin coches blindados. La seguridad de fiarse de un pueblo. De verdad que siempre hay el peligro de que haya un loco, de que haya un loco que haga algo. Pero también está el Señor. Hacer un espacio blindado entre el obispo y el pueblo es una locura. Prefiero esta locura, fuera, tener el riesgo de la otra locura, la locura fuera. La cercanía nos hace bien a todos.

Luego la organización de la jornada, no esta precisa, todo, la parte artística, la parte religiosa, la parte catequética, la parte litúrgica, ha sido bellísima. También ellos tienen una capacidad de expresarse con el arte. Ayer, por ejemplo, han hecho cosas bellísimas, bellísimas.

Luego, Aparecida. Para mí ha sido una experiencia religiosa fuerte. Recuerdo la V conferencia. Fui allí a rezar, a rezar. Quería ir allí solo, un poco escondido, pero había una muchedumbre impresionante y no era posible. Eso lo sabía antes de llegar. Hemos rezado. No sé.

Una cosa... El trabajo vuestro ha sido, me dicen, yo no he leído diarios estos días ni he visto la televisión, no he tenido tiempo, pero me dicen que ha sido un trabajo bueno, bueno, bueno. Gracias. Gracias por la colaboración que vosotros habéis ofrecido.

Luego está el número de los jóvenes. Hoy no puedo creerlo, pero hoy el gobernador hablaba de tres millones. No puedo creérmelo, pero desde el altar, no sé si alguno de vosotros ha estado en el altar, desde el altar hasta el final estaba toda la playa llena, hasta la curva. Más de 4 kilómetros. Tantos jóvenes. Dicen, me ha dicho monseñor Tempesta, que eran de 178 países. También el vicepresidente me ha dicho este número. Eso es seguro. Es importante.

- Santidad, buenas noches. En nombre de todos los compañeros le queremos agradecer estos días que nos ha regalado en Río de Janeiro, el trabajo que ha hecho y el esfuerzo que le ha supuesto. Y también, en nombre de todos los periodistas españoles, les queremos agradecer las plegarias y los rezos por las víctimas del accidente ferroviario de Santiago de Compostela. Muchísimas gracias. La primera pregunta no tiene mucho que ver con el viaje, pero aprovechamos la ocasión de que nos da esta posibilidad y quería preguntarle: Santidad, en estos cuatro meses de pontificado hemos visto que ha creado varias comisiones para reformar la Curia vaticana. Quisiera preguntare: ¿qué tipo de reforma tiene en mente? ¿Contempla la posibilidad de suprimir el IOR, el llamado banco del Vaticano?

- Los pasos que fui dando en estos cuatro meses y medio vienen de dos vertientes. El contenido de lo que había que hacer, todo, viene de la vertiente de las congregaciones generales que tuvimos los cardenales. Fueron cosas que los cardenales pedimos al que iba a ser el nuevo Papa. Yo me acuerdo que pedía muchas cosas, pensando en otro (risas) Pedíamos que había que hacer esto...

Por ejemplo, en la comisión de ocho cardenales, es importante tener una consulta outsider, no las consultas que se tienen, sino outsider. Esto va en la línea, y aquí hago como una abstracción, en la línea de la maduración de la relación entre sinodalidad y primado. Estos ocho cardenales favorecen la sinodalidad. Ayudan a que los diversos episcopados del mundo se vayan expresando en el mismo gobierno de la Iglesia.

Hay muchas propuestas que se hicieron que aún no están puestas en práctica como la reforma de la secretaría del sínodo, en la metodología, cómo la comisión postsinodal, que tenga carácter permanente de consulta, cómo los consistorios cardenalicios con temáticas no tanto formales como por ejemplo una canonización, sino con otras temáticas, etcétera. La vertiente de los contenidos viene de ahí.

La segunda vertiente es la oportunidad. Te confieso que a mí no me costó, al mes de pontificado, armar la comisión de los ochos cardenales.

La parte económica pensaba tratarla el año que viene, porque no es lo más importante que hay que tocar. Sin embargo, la agenda se cambió debido a unas circunstancias que ustedes conocen, que son de dominio público, y que aparecieron problemas y había que enfrentarlos. El primero el problema del IOR: cómo encaminarlo, cómo delinearlo, cómo reformularlo, cómo sanear lo que haya que sanear. Ahí está la primera comisión de referencia.

Ustedes conocer el quirógrafo, sus integrantes, lo que se pide... Después tuvimos la reunión de la comisión de los 15 cardenales que se ocupan de los aspectos económicos de la Santa Sede. Son de todas partes del mundo. Y allí, preparando la reunión, se vio la comisión de hacer una misma comisión de referencia para toda la economía de la Santa Sede. Se tocó el problema económico fuera de agenda, pero estas cosas suceden en el oficio de gobierno. Uno va por aquí pero le patean un golazo de allá y lo tiene que atajar, ¿no es cierto? La vida es así y eso es lo lindo de la vida.

Respecto a la pregunta que me hacía del IOR. Perdón estoy hablando en castellano (cambia al italiano) No sé cómo terminará el IOR. Algunos dicen que tal vez es mejor que sea un banco, otro que es mejor que sea un fondo de ayuda, otros dicen que hay que cerrarlo. Se escuchan estas voces. Yo no sé, me fío del trabajo de las personas del IOR, que están trabajando cone sto. también de la comisión. El presidente del IOR continúa, el que había antes, mientras que el director y el vicedirector han presentado su dimisión.

No sé decirle cómo terminará esta historia. Esto es también hermoso. Se busca, se encuentra. Somos humanos. Debemos encontrar lo mejor, pero las características del IOR sea un banco, un fondo o lo que sea, sus características deben ser transparencia y honestidad. Debe ser así. Gracias.

- Santo Padre, mi pregunta es tal vez indiscreta. Ha dado la vuelta al mundo la fotografía de cuando hemos partido de usted, que sube la escalerilla del avión llevando un maletín negro. Ha habido artículos en todo el mundo comentando esta novedad. Ha habido hipótesis de qué contenía el maletín. ¿Por qué la ha llevado usted y no un colaborador? ¿Nos puede decir que era dentro?

- No había dentro la llave de la bomba atómica. La llevaba porque siempre lo he hecho. Cuando viajo la llevo. Dentro llevo la cuchilla de afeitar, el breviario, la agenda, un libro para leer. Llevo uno sobre Santa Teresita, de la que soy devoto. Siempre llevo el maletín cuando viajo, es normal. Debemos ser normales. Es un poco extraño lo que me dices que ha dado la vuelta al mundo esa foto. Debemos habituarnos a ser normales. La normalidad de la vida

- Santidad, ¿por qué usted pide tan insistentemente que se rece por usted? No es normal o habitual escuchar tanto a un Papa que pide que recen por él.

-Yo siempre he pedido esto. Cuando era sacerdote lo pedía pero no tan frecuentemente . He comenzado a pedirlo con cierta frecuencia en el trabajo de obispo. Siento que si el Señor no ayuda en este trabajo, para que el pueblo de Dios vaya hacia adelante, uno no puede.

Yo me siento de verdad con tantos límites, con tantos problemas, también pecador. Vosotros lo sabéis. Debo pedir esto, me viene de dentro. También a la Virgen le pido que rece por mí al Señor. Es una costumbre que me viene de fuera, también de la necesidad que tengo por mi trabajo. Siento que debo pedirlo. Es así.

- Santidad, en la búsqueda de hacer estos cambios, usted dijo al grupo de América Latina que hay tantos santos que trabajan en el Vaticano, pero también personas que son un poco menos santas. ¿Ha encontrado resistencia a su deseo de cambiar las cosas en el Vaticano? La segunda pregunta es: usted vive de un modo muy austero en Santa Marta, ¿quiere que sus colaboradores, también los cardenales, sigan este ejemplo y vivan en comunidad o es algo sólo para usted?

- Los cambios vienen también de dos vertientes. Lo que los cardenales hemos pedido y lo que viene de mi personalidad. Usted hablaba de que me he quedado en Santa Marta. Pero no podría vivir solo en el palacio, no es lujoso. El apartamento pontificio no es tan lujoso, es amplio y grande, pero no lujoso. Pero yo no puedo vivir solo o con un pequeño grupito. Necesito a gente, encontrarme con la gente, hablar con la gente.

Por eso cuando los chicos de las escuelas jesuitas me han preguntado que si era por austeridad o por pobreza, les he dicho que no. Es por motivos psiquiátricos, porque psicológicamente no puedo. Cada uno debe llevar adelante su vida con su modo de vivir y de ser. Los cardenales que trabajan en la Curia no viven como ricos o fastuosos. Viven en apartamentitos, son austeros los que conozco.

Cada uno debe vivir como el Señor le pide que viva. La austeridad , una austeridad general creo que es necesaria para todos, para todos los que trabajamos en el servicio de la Iglesia. Hay muchas tonalidades de austeridad, cada uno de buscar su camino.

Respecto a los santos, es verdad: hay santos en la curia. Cardenales, sacerdotes, obispos, monjas, laicos... Es gente que reza, que trabaja mucho y que también va al encuentro de los pobres. A escondidas. Yo sé de algunos que dan de comer a los pobres o que en su tiempo libre acuden a hacer ministerio en una iglesia o en otra. Hay santos en la curia. Aunque también hay alguno que no es tan santo. Y esos son los que hacen más ruido.

Ya sabéis que hace más ruido un árbol que cae que un bosque que crece. Y me duelen esas cosas. Hay algunos que dan escándalo. Tenemos este monseñor en prisión, creo que aún sigue en prisión, y no ha ido a la cárcel porque se pareciera precisamente a la beata Imelda... No era un santo. Son escándalos y hacen daño.

Una cosa que nunca he dicho antes y de la que me he dado cuenta: creo que la curia ha caído de nivel respecto al que tenía en los tiempos de los viejos curiales, fiel, que hacía su trabajo. Necesitamos esas personas. Creo que hay, pero no tantas como en una época. El perfil del viejo curial, yo lo llamo así; tenemos que tener más de esos.

Sobre si encuentro resistencia…: si hay resistencia por ahora yo no la he visto. Es verdad que no he hecho tantas cosas. Lo que si he encontrado es ayuda y gente leal.

Por ejemplo, a mi me gusta cuando una persona me dice: ´Yo no estoy de acuerdo´, y esto lo he encontrado. ´Yo esto no lo veo, no estoy de acuerdo, yo se lo digo y luego haga lo que quiera´: alguien que te dice eso es un verdadero colaborador, y eso lo he encontrado. Pero esos que te dicen: "Ay, qué bonito, qué bonito, qué bonito", y luego dicen lo contrario en otra parte, todavía no me he dado cuenta. Quizás hay alguno, pero no me he dado cuenta de estas resistencias. En cuatro meses no se pueden encontrar muchas.

- La sociedad brasileña ha cambiado, los jóvenes han cambiado. Usted no ha hablado sobre el aborto ni sobre el matrimonio ente personas del mismo sexo. En Brasil se ha aprobado una ley que amplía el derecho al aborto y otra que contempla los matrimonios entre personas del mismo sexo. ¿Por qué no ha hablado sobre eso?

- La Iglesia se ha expresado ya perfectamente sobre eso, no era necesario volver sobre eso, como tampoco hable sobre la estafa, la mentira u otras cosas sobre las cuales la Iglesia tiene una doctrina clara. No era necesario hablar de eso, sino de las cosas positivas que abren camino a los chicos. Además los jóvenes saben perfectamente cuál es la postura de la Iglesia.

- ¿Pero cuál es su postura en esos temas?

- La de la Iglesia, soy hijo de la Iglesia.

- Desde el 13 de marzo usted se presenta como obispo de Roma con una enorme y fortísima insistencia. Nos gustaría saber el sentido profundo de esta insistencia, si tal vez más que la colegialidad está relacionado con el ecumenismo, con el ser primus inter paris...

- En esto no se debe ir más allá de lo que se dice. El Papa es obispo, es obispo de Roma . Y porque es obispo de Roma es sucesor de Pedro, vicario de Cristo. Son otros títulos, pero el primer título es obispo de Roma y de ahí viene todo. Pensar que esto quiere decir ser primus inter paris no, eso no, no es consecuencia de esto. Es simplemente que es el primer título del Papa. Ha hablado de ecumenismo. Creo que esto favorece un poco el ecumenismo, pero sólo eso.

- Una pregunta sobre sus sentimientos. Hace unas semanas, a un niño que le preguntó cómo se sentía y si deseaba ser Papa, le dijo que había que estar loco para ello. Después de su primera experiencia multitudinaria como han sido estos días en Río, me pregunto si nos puede contar como se siente siendo Papa, si es un trabajo duro, si es feliz siéndolo y si de alguna manera ha acrecentado su fe o si por el contrario ha tenido alguna duda...

- Hacer el trabajo de obispo es una cosa bonita, es bonito. El problema es cuando uno busca ese trabajo, eso ya no es tan bonito, eso no es del Señor. Pero cuando el Señor llama a un sacerdote a convertirse en obispo eso es bonito. Existe siempre el peligro de creerse un poco superior a los otros, no como los demás, un poco príncipe…. Son peligros y pecados. Pero el trabajo de obispo es bonito, es ayudar a los hermanos a avanzar.

El obispo delante de los fieles para señalar el camino, el obispo en medio de los fieles para ayudar a la comunión, el obispo detrás de los fieles porque los fieles con frecuencia tienen el olfato de la calle. Me preguntaba si me gusta…. Sí, me gusta ser obispo. En Buenos Aires he sido muy feliz. He sido feliz, el Señor me ha asistido en eso. Como obispo he sido feliz, como sacerdote he sido feliz. En ese sentido me gusta.

- ¿Y ser Papa le gusta?

- Si, también. Cuando el Señor te pone ahí, si tú haces lo que el Señor te pide eres feliz. Eso es lo que siento.

- Le hemos visto estos días lleno de energía, incluso por la noche tarde, y le vemos ahora que está tranquilamente de pie mientras el avión se mueve muchísimo. Se habla mucho de próxios viajes, se habla de Jerusalén, de Argentina... ¿Tiene ya un calendario definido para el próximo año?

- Definido, definido no hay nada. Pero puedo hablar de cosas que estamos pensando. Definido 22 de septiembre Cagliari. Después, el 4 de octubre, Asís. También tengo en mente, dentro de Italia, ir un día a ver a mi familia. Cogerme un avión por la mañana y volver en otro por la noche, mis familiares, pobrecillo, me llaman, tenemos una buena relación.

Fuera de Italia el patriarca Bartolomeo I quiere hacer un encuentro para conmemorar los 50 años del encuentro entre Atenágoras y Pablo VI en Jerusalén. El Gobierno israelí nos ha hecho una invitación especial para ir a Jerusalén, el Gobierno de la Autoridad Palestina creo que lo mismo. Esto se está pensando, aún no se sabe si se hará o no se hará.

En América Latina creo que no hay posibilidad de volver, porque el Papa latinoamericano, que acaba de hacer el primer viaje a Latinoamérica…... Adiós. Debemos  esperar un poco.

Creo que se puede ir a Asia, pero está todo en el aire. He recibido invitaciones para ir a Sri Lanka y a Filipinas. A Asia se debe ir. El Papa Benedicto XVI no ha tenido tiempo de ir a Asia, y es importante. Fue a Australia, Europa, América, pero no a Asia.

Ir a Argentina yo creo que se puede esperar un poco, porque yo creo que todos estos viajes de los que le he hablado tienen una cierta prioridad. Yo quería ir a Constantinopla el 30 de septiembre para visitar a Bartolomeo I pero no es posible. No es posible por mi agenda. Si podemos el encuentro lo haremos en Jerusalén.

- Cuando se ha reunido con los jóvenes argentinos, un poco en broma y un poco en serio les ha dicho que a veces se sentí enjaulado. ¿A qué se refería exactamente?

- ¿Usted sabe la de veces que he tenido ganas de pasear por las calles de Roma? Porque a mi me gusta andar por las calles, me gustaba tanto y en ese sentido me siento un poco enjaulado. Pero debo decir que los de la Gendarmería vaticana son buenos, son realmente buenos y yo les estoy agradecido. Ahora me dejan hacer algunas cuantas cosas más, pero es su deber garantizar la seguridad.

»Enjaulado en ese sentido, de que a mi me gusta andar por la calle, pero entiendo que no es posible, lo entiendo. Lo dije en ese sentido. Porque, como decimos en Buenos Aires, yo era un sacerdote callejero. (Preguntaba por el tiempo porque deben servir la cena... ¿Tenéis hambre?)

P.- En Brasil la Iglesia católica está perdiendo fieles. ¿El movimiento Renovación Carismática es una posibilidad de evitar que los fieles se vayan a iglesias pentecostales?

-Es cierto lo que usted dice de la baja de fieles. Es cierto. Hemos hablado con los obispos brasileños del problema en una reunión que hemos tenido ayer. Usted preguntaba sobre el movimiento de la Renovación Carismática. Pero les digo algo, a fines del 70, inicios 80, yo no los podía ver. Una vez, hablando de ellos, había dicho esta frase: «estos confunden una celebración litúrgica con una escola de samba». ¡Eso había dicho! Me arrepentí.

Después conocí mejor, es verdad que el movimiento tiene buenos asesores y ha ido en un buen camino. Ahora creo que este movimiento hace mucho bien a la Iglesia, vive en la Iglesia. En Buenos Aires me reunía a menudo y una vez por año hacía una misa con todos ellos en la Catedral. Pero los he favorecido, me convertí, he visto el bien que hacían. Porque en este momento de la Iglesia y amplío un poco la respuesta, creo que los movimientos son necesarios.

Los movimientos son una gracia del Espíritu. ¿Pero como se puede sostener un movimiento que es tan libre? ¡Es que la Iglesia es libre! El Espíritu Santo hace lo que quiere, después él hace el trabajo de la armonía. Pero creo que los movimientos son una gracia, esos movimientos que tienen el Espíritu de la Iglesia. Por eso creo que el movimiento de Renovación Carismática no sólo sirve para evitar que algunos pasen a los pentecostales, sino que sirven a la Iglesia misma, que se renueva. Cada uno busca el movimiento según su carisma, donde lo lleva el Espíritu.

- ¿Está cansado?

- No estoy casado, yo estoy soltero. (risas)

- Usted dijo que la Iglesia sin la mujer pierde fecundidad. ¿Qué medidas concretas tomará por alcanzar esto, una mujer jefe dicasterio? Y una pregunta técnica: ¿en el avión pidió un acondicionamiento especial?

- Empezamos por lo último: este avión no tiene ningún acondicionamiento especial. Yo estoy adelante, tengo un buen asiento, común. Yo hice escribir una carta e hice hacer un llamado telefónico para decir que yo no quería acondicionamientos especiales. ¿Está claro?

Segundo, la mujer: una Iglesia sin mujeres es como el Colegio Apostólico sin María. El rol de la mujer en la Iglesia no es sólo la maternidad, la madre de familia, sino que es más fuerte, es el icono de la Virgen, de la Madonna, esa que ayuda a crecer a la Iglesia.

Piensen que la Virgen es más importante que los apóstoles. La Iglesia es femenina, es esposa, es madre. El rol de la mujer en la Iglesia no es sólo el de mamá, que trabaja, que me da… es otra cosa. Los papas, Pablo VI escribió una cosa lindísima sobre las mujeres, pero creo que debemos ir más adelante en la explicitación de este rol y carisma de la mujer en la Iglesia.

No se puede entender una Iglesia sin mujeres, pero mujeres activas en la Iglesia, con su perfil, que llevan adelante. Yo pienso, un ejemplo que no tiene nada que ver con la Iglesia, pero es un ejemplo histórico en América Latina: Paraguay. Para mí la mujer del Paraguay es la mujer más gloriosa de América latina. quedaron después de la guerra OCHO mujeres por hombre. Y estas mujeres hicieron una elección difícil: la de tener hijos para salvar la patria, la cultura, la fe y la lengua.

En la Iglesia hay que pensar en la mujer en esta perspectiva de elecciones arriesgadas, pero como mujer, hay que explicitar. Creo que aún no hemos hecho aún una profunda teología en la Iglesia. Sólo un poco de eso, un poco de aquello, lee la lectura, mujeres monaguillo, es la presidenta de Cáritas... Pero hay más, hay que hacer una profunda Teología de la mujer. Esto es lo que pienso.

- Santidad, buenas noches, queríamos saber cuál es su relación de trabajo, no tanto amistosa, de colaboración, con Benedicto XVI. No ha habido antes una circunstancia así y si tiene contactos frecuentes y si lo está ayudando en la carga.

- La última vez que hubo dos papas o tres papas no se hablaban entre ellos, se estaban peleando a ver quién era el verdadero. Tres llegaron a haber durante el Cisma de Occidente. Hay algo que califica mi relación con Benedicto: yo lo quiero mucho. Siempre lo quise mucho, para mí es un hombre de Dios, es un hombre humilde, que reza. Yo fui muy feliz cuando fue electo Papa.

También cuando él renunció para mí fue un ejemplo de un grande, un hombre de Dios, un hombre de oración. Él ahora vive en el Vaticano y algunos me dicen "pero cómo se puede hacer esto, dos papas en el Vaticano, pero no te molesta, él no te hace la revolución en contra?". Todas las cosas que dicen, no?

Pero yo encontré una frase para esto: es como tener al abuelo en casa, pero el abuelo sabio, en una familia el abuelo está en casa, es venerado, es amado, es escuchado. El es un hombre de una prudencia, no se mete. Yo lo dije muchas veces: "Santidad, haga su vida, venga con nosotros". Él vino para la inauguración de la estatua de San Miguel…. Para mí, esa frase dice todo: es como tener el abuelo en casa, es mi papá.

Si yo tuviera una dificultad o tengo algo que no he entendido, puedo llamarlo. Y cuando fui para hablar de ese problema grande de Vatileaks él me dijo todo con una simplicidad. No sé si saben cuando nos habló en el discurso de despedida, el 28 de febrero, entre ustedes está el próximo Papa y yo prometo obediencia. Esto es grande, es un grande.

- Santo Padre buenas noches, gracias por haber traido tanta alegria para Brasil y gracias por responder preguntas. Quisiera saber porque usted ayer dijo a los obispos brasileños sobre la participación de las mujeres en la Iglesia. ¿Cómo debe ser participación de las mujeres en la Iglesia? Qué piensa de ordenación de las mujeres?

- Como dije, sobre la participación de las mujeres en la Iglesia no nos podemos cerrar a que hagan las mujeres monaguillo, a la presidenta de Cáritas, a la catequista, tiene que haber algo más, con lo que dije de la Teología de la Mujeres.

En cuanto a la ordenación de las mujeres la Iglesia ha hablado y dice no. Lo ha dicho Juan Pablo II, pero con una formulación definitiva. Esa puerta está cerrada. Pero sobre esto quiero decirles algo: la Virgen María era más importante que los apóstoles y que los obispos y que los diáconos y los sacerdotes.

La mujer en la Iglesia es más importante que los obispos y que los curas. ¿Cómo? Esto es lo que debemos tratar de explicitar mejor. Creo que falta una explicación teológica sobre esto.

- Santo Padre, en este viaje usted ha hablado más de una vez de la misericordia. En cuanto al acceso de los sacramentos de los divorciados vueltos a casr, ¿existe la posibilidad de que algo cambie en la disciplina de la Iglesia y que estos sacramentos sean una ocasión de acercar a estas personas y ni una barrera?

- Este es un tema que se pregunta siempre. La misericordia es más grande de los casos de que usted habla. Creo que este cambio de época y también tantos problemas de la Iglesia como los testimonios de algunos sacerdotes no buenos, de corrupción de la Iglesia, también el problema del clericalismo, ha dejado muchos heridos.

Y la Iglesia es madre, debe ir a curar a los heridos con misericordia. Pero si el Señor no se cansa de perdonar, nosotros no tenemos otra elección que ésa. Primero de todo, curar los heridos. La Iglesia es mamá. Debe ir en este camino de la misericordia, encontrar una misericordia para todos.

Pienso que cuando el hijo pródigo volvió a casa, el papá no le dijo ´¿quién sos? ¿qué hiciste con el dinero´. No, hizo una fiesta. Quizás luego, cuando el hijo quiso hablar, habló. Pero no sólo esperó, fue a encontrarlo. Esto es misericordia, esto es kairos.

Esta primera intuición la tuvo Juan Pablo II, cuando él comenzó con Faustina Kowalska, la divina Misericordia, había intuido que era una necesidad de este tiempo.

En cuanto el problema de la comunión a las personas en segunda unión -porque los divorciados sí pueden hacer la comunión-, creo que esto es necesario mirarlo en la totalidad de la pastoral matrimonial. Esto es un problema.

Pero abro un paréntesis: los ortodoxos tienen una praxis diferente, ellos siguen la teología de la economía, hacen una segunda posibilidad y cierro paréntesis. Creo que este problema hay que estudiarlo en el marco de la pastoral matrimonial. Y por eso uno de los temas a consultar con estos 8 del consejo de cardenales, que nos reuniremos el 1, 2, 3 de octubre, es cómo seguir adelante en la pastoral matrimonial.

Y otra segunda cosa, estuvo conmigo hace pocos días el secretario del sínodo de obispos, para el tema del próximo sínodo, es un tema antropológico, pero hablando y hablando vimos que este tema antropológico hay que tratarlo en la pastoral matrimonial profundo. Estamos en camino hacia una pastoral matrimonial profunda, es un problema y hay tantos problemas.

Les digo una: mi antecesor, el cardenal Quarracino decía que la mitad de los matrimonios eran nulos porque se casan sin madurez, se casan sin darse cuenta de que es por toda la vida, quizás se casan por motivos sociales… y esto entra en la pastoral matrimonial.

Y también el problema judicial de la nulidad de matrimonios también eso debemos revisar porque los tribunales eclesiásticos no bastan para eso. Es complejo el problema de la pastoral matrimonial. Gracias.

- Buenas noches Santo Padre, quisiera saber si usted desde cuando es Papa todavía se siente jesuita.

- Es una pregunta teológica porque los jesuitas hacen votos de obediencia al Papa. Pero si el Papa es jesuita, quizás tiene que hacer voto de obediencia al Padre General de los Jesuitas (risas), no sé cómo se soluciona esto.

Yo me siento jesuita en mi espiritualidad, en la espiritualidad de los ejercicios, en la espiritualidad que tengo en el corazón. Tanto me siento jesuita que en tres días iré a festejar con los jesuitas en la Iglesia de San Ignacio , haré una misa a la mañana, no he cambiado espiritualidad, sigo pensando como jesuita, no hipócritamente, pero pienso como jesuita.

- A los cuatro meses de su pontificado, ¿nos puede hacer un pequeño resumen? ¿Qué ha sido lo mejor, lo peor y qué le ha sorprendido más en este periodo?

- De verdad que no sé cómo responder a esta pregunta. Cosas malas no ha habido. Cosas buenas sí. Por ejemplo el encuentro con los obispos italianos. Ha sido muy bonito.

Una cosa dolorosa, que me ha golpeado el corazón, fue la visita a Lampedusa. Cuando llegan estas barcas, los dejan a algunas millas de distancia de la costa y ellos tienen que llegar solos. Ha sido doloroso porque pienso que estas personas son víctimas del sistema socioeconómico mundial.

Pero la cosa peor [tono de broma] fue una ciática, de verdad, la tuve en el primer mes. Fue dolorosísimo. No se la deseo a ninguno. He encontrado muchas personas en el Vaticano. Pero buenas, buenas, buenas.

- En nombre de los 50.000 argentinos que me encontré y me decían vas a viajar con el Papa preguntarle cuándo va a viajar pero ya dijo que no va a viajar, entonces le voy a hacer una pregunta más difícil. ¿Se asustó cuando vio el informe Vatileaks?

- No. Les voy a contar una anécdota sobre el informe Vatileaks. Cuando fui a ver al papa Benedicto, después de rezar en la capilla nos reunimos en el estudio y había una caja grande y un sobre. Benedicto me dijo: en esta caja grande están todas las declaraciones que han prestado los testigos. Y el resumen y las conclusiones finales están en este sobre. Y aquí se dice tal, tal, tal.… Lo tenía todo en la cabeza. Pero no, no me he asustado. Es un problema grande, pero no me he asustado.

-Dos cosas. La primera, ¿tiene la esperanza de que este viaje sirva para detener la pérdida de fieles que en Brasil ha sido muy fuerte? ¿Cree que su viaje puede contribuir a que la gente vuelva a la Iglesia? La segunda es más familiar: a usted le gustaba mucho la Argentina y llevaba muy en el corazón a Buenos Aires. Los argentinos se preguntan si usted no extraña ir en colectivo, andar por la calle...

- Un viaje papal siempre hace bien, pero no solo por la presencia del Papa, pero esta Jornada de la Juventud se han movilizado muchos jóvenes y ellos harán mucho bien a la Iglesia. Creo que esto será positivo pero no solo por el viaje, sino sobre todo por la jornada. Ha sido un evento maravilloso. Y de Buenos Aires, sí. Buenos Aires me falta. Pero es una falta serena. Yo creo que usted conoce mejor con el libro que ha escrito...

- Gracias por haber mantenido la promesa de mantener las preguntas a la vuelta. La pregunta: usted va a canonizar a dos grandes papas, a Juan XXIII y a Juan Pablo II, quería saber cuál es según usted el modelo de santidad del uno y del otro y el impacto que han tenido en la Iglesia y en usted.

- Juan XXIII es un poco la figura del cura de pueblo. El cura que ama a cada uno de sus fieles y sabe cuidar a sus fieles. Y esto lo ha hecho como arzobispo, como nuncio...… Es un cura de pueblo bueno, y con un sentido del humor muy grande y una gran santidad.

Cuando era nuncio, algunos no lo querían mucho en el Vaticano y cuando llegaba a llevar cosas o a pedir alguna cosa en las oficinas, lo hacían esperar. Nunca se quejaba. Rezaba el rosario, leía el breviario... Era un hombre humilde. Y también alguien que se preocupaba por los pobres.

Una vez, el cardenal Casaroli volvió de una misión creo que en Turquía o en la antigua Checoslovaquia y fue a verlo para informarle de la misión, en aquellos tiempos de la diplomacia de pequeños pasos. Cuando Casaroli se iba, lo paró y le dijo: excelencia, una pregunta: ¿usted continua yendo a visitar a aquellos jóvenes presos la cárcel de menores de Casal del Marmo? El cardenal le dijo que sí y Juan XXIII le pidió: no los abandone nunca. Era un grande. Un hombre que se dejaba guiar por el Señor.

Y Juan Pablo II fue un gran visionario de la Iglesia. Un hombre que ha llevado el Evangelio a todos. Es un san Pablo. Un grande. Hacer la ceremonia de canonización juntas es un mensaje a la Iglesia: estos dos son buenos.

Y también siguen su curso las causas de Pablo VI y del papa Luciani. Quería decir que la fecha de canonización yo pensaba en diciembre, pero hay un gran problema: los pobres que tienen que venir de Polonia. Porque los que tienen dinero pueden venir en avión, pero para los pobres que tengan que venir en autobús el viaje en diciembre es muy duro. Creo que habrá que repensar la fecha. Yo he hablado con el cardenal ... y hemos visto dos posibilidades, o Cristo Rey de este año o el domingo de la Misericordia del próximo año. Creo que es poco tiempo el Cristo Rey de este año. No sé, debo hablar otra vez con el cardenal X sobre esto.

- Quiero hacerle una pregunta un poco delicada. La historia de monseñor Ricca ha dado la vuelta al mundo, quería saber como va afrontar este asunto y todo lo relacionado con el lobby gay en el Vaticano.

- Con respecto a monseñor Ricca, he hecho lo que el derecho canónico manda hacer, que es la investigación previa. Y esta investigación no dice nada de lo que se ha publicado. No hemos encontrado nada. Pero yo querría añadir una cosa sobre esto.

Yo pienso que tantas veces en la Iglesia, con relación a este caso y a otros casos, se va a buscar los pecados de juventud, por ejemplo. Y se publican. Pero si una persona –laica, cura, o monja— comete un pecado y luego se arrepiente, el Señor la perdona. Y cuando el Señor perdona, olvida. Y esto para nuestra vida es importante. Cuando confesamos, el señor perdona y olvida.

Y nosotros no tenemos derecho a no olvidar. Porque corremos el riesgo de que el Señor no se olvide de lo nuestro. Es un peligro. Lo importante es hacer una teología del pecado. Muchas veces pienso en San Pedro. Hizo de los peores pecados, renegar de Cristo. Y con ese pecado lo hicieron Papa.

Y respondiendo a su otra pregunta concreta, hemos hecho la investigación previa y no hemos encontrado nada.

Luego usted hablaba del lobby gay. Se escribe mucho del lobby gay. Todavía no me encontrado con ninguno que me dé el carné de identidad en el Vaticano donde lo diga. Dicen que los hay. Cuando uno se encuentra con una persona así, debe distinguir entre el hecho de ser gay del hecho de hacer lobby, porque ningún lobby es bueno. Si una persona es gay y busca al Señor y tiene buena voluntad, ¿quién soy yo para criticarlo? El catecismo de la Iglesia católica lo explica de forma muy bella esto. (Puntos 2357-2259 http://www.vatican.va/archive/catechism ... a6_sp.html ). Dice que no se deben marginar a estas personas por eso. Hay que integrarlas en la sociedad. El problema no es tener esta tendencia.

Debemos ser hermanos. El problema es hacer un lobby. De esta tendencia o lobby de los avaros, de los políticos, de los masones... Tantos lobbys. Este el problema más grande. Le agradezco tanto que me haya hecho esta pregunta. Gracias a todos.



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#166205 por Daroca
03 Ago 2013, 03:56






"Yo sólo podría creer en un Dios que supiera bailar" (Friedrich Nietzche)
#166244 por Daroca
05 Ago 2013, 13:02
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Por Pedro Miguel García Gómez he conocido este poema del mago Frank, que me ha parecido muy bonito y apropiado para incluirlo aquí. Enhorabuena al mago Frank.


A SAN JUAN BOSCO, PATRÓN DE LOS ILUSIONISTAS.

Tú que también fuiste Mago
y por tu noble labor te convertiste en Santo,
haz que la labor que hago
por lo menos logre mitigar un llanto.

Que toda la habilidad
que brote de mis manos
se convierta en caridad
y amor a mis hermanos.

Tú que supiste aliviar
abandono y zozobra,
permíteme continuar
con mi Magia tu obra.

Y así, siguiendo tu ejemplo
me acercaré al Ser Supremo
haciendo de la Magia un templo
para el pobre y el enfermo.


Mago Frank


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#166261 por Daroca
06 Ago 2013, 17:36
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퇴원했어요 !! ㅋㅋ
아직 불편하지만 회복이 빛의 속도에요 푸하하~
의사선생님이 살아있는것도 기적인데 회복도 빠르데요 크크
내일은 라스베가스로 가요~!
가서 기운팍팍 받아올게요 !!
모두들 안전 운전 ㅠㅠ 하길 바라면서 저의 사고 사진을 드립니다 ㅠㅠ
(Facebook de Yu Ho JIn. Según la traductora de Google, más o menos:_ "¡¡¡Ya he salido del hospital!!! Estoy todavía dolorido, pero ¡la recuperación ha sido a la velocidad de la luz! El médico ha dicho que ha sido un milagro, que nunca había visto una recuperación tan rápida, jaja. Mañana me voy a Las Vegas. ¡Voy a salir adelante! ¡Con alegría! ¡Arriba! Todo el mundo creía que para mí el conducir era algo seguro... pues no. Os dejo una foto de cómo ha quedado el coche. Gracias a todos.").





Esta oración es diferente a otras sobre magos, porque es para dar gracias.

Ha tenido un aparatoso accidente con el coche, pero ya está fuera del hospital, a pesar de cómo ha quedado el vehículo. Así que te pedimos, Señor, le ayudes a reponerse totalmente y te damos gracias por haberle dejado un rato más con nosotros. Tú sabrás por qué has permitido esta experiencia en su vida, y que seguramente va a influir en su arte y en su ser, haciéndole quizá más sabio, más sensible (si cabía), etc. Una vivencia así no deja igual a nadie, se aprende mucho.

Es curioso, pero aunque de toda persona que tiene un percance, sentimos las penalidades por las que pueda atravesar, hay algunas personas con las que, sin poderlo nosotros controlar, lo sentimos más. Toda persona vale lo mismo: infinito, pero el corazón a veces no se puede dominar a la hora de sentir. Eso ocurre con los percances que sufren nuestros familiares, las buenas personas, la gente especialmente simpática, los que suelen hacer obras de caridad, etc. Y uno de los tipos de personas con las que sientes más lo malo que les pase, son los buenos artistas. O sea, el arte nos da un valor, nos da cariño de los demás. Si te enteras de algo malo sobre un buen artista, dices: "¡no, él no, por favor! ¡Otro tampoco, pero él no!" Así que lo sepamos, que el hacer magia, no de cualquier forma sino con muchísima calidad, nos añade un valor, que si nos pasa algo muchos lo sentirán más que si no hemos alcanzado esas cotas. Con los objetos también nos pasa: te duele más que se rompa un jarrón que era una pieza cerámica fina exquisita y dificilísima de hacer, aunque no sea tuyo, que un jarrón del todo a 1€.

Y lo más grande es que Dios no siente así. Para Dios todos somos cerámica fina, jarrones valiosísimos de Sevres, aunque no destaquemos, incluso aunque seamos malas personas ¡Qué grande y extraño!. Pero para la sociedad, el arte nos aporta un valor añadido como seres humanos. Si hubiera muerto Yu ho Jin, nos hubiera invadido una tristeza bastante considerable, y creo que no podemos evitar este tipo de distinciones, porque nos parece como si Yu Ho Jin estuviera más cerca de Dios que los demás hombres, por cómo hace magia, y por eso nuestro subconsciente lo siente más valioso, aunque sepamos que todos los hombres somos iguales a los ojos del Señor.


Unámonos en una desacostumbrada y feliz oración PARA DAR GRACIAS por Yu Ho Jin, y por lo que pueda necesitar.

Padre nuestro, que estás en el Cielo,
santificado sea Tu Nombre,
venga a nosotros Tu Reino,
hágase Tu Voluntad
en la Tierra como en el Cielo.
Danos hoy nuestro pan de cada día,
perdona nuestras ofensas,
como también nosotros perdonamos a los que nos ofenden.
No nos dejes caer en la tentación
y líbranos del mal. AMEN.

Dios te salve, María,
llena eres de Gracia,
el Señor es contigo,
bendita tú eres entre todas las mujeres
y bendito es el fruto de tu vientre, Jesús.
Santa María, Madre de Dios,
ruega por nosotros pecadores,
ahora y en la hora de nuestra muerte. AMEN.

Gloria al Padre, gloria al Hijo, gloria al Espíritu Santo,
como era en un principio, ahora y siempre,
por los siglos de los siglos. AMEN.











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