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Permítanme una reflexión, y por favor, compartan la suya!

Si conseguimos unir en una misma actuación una gran dosis de arte con una de habilidad, el resultado probablemente sea mejor que si omitimos una de las partes. Pero indudablemente, será mejor, que si la parte omitida es la artística.

La intención de la magia siempre es comunicar. Elegir qué se pretende comunicar, es el primer paso a la hora de crear cualquier juego.
El primero.
Sí, ANTES de comprarlo... .

Una actuación que requiera una gran proporción de habilidad para llevarse a cabo, también comunica, y conmueve. El público se siente identificado y revive la emoción de sus propias experiencias con forma "Sueño aparentemente imposible --- Tremendo esfuerzo --- Logro, éxito". Creo que la clave para esta clase de números, que no tienen un trasfondo mayor (como un número de manipulación de cartas que no representan más que eso, cartas), es hacer la parte de "Tremendo esfuerzo", más agradable. Si el habilidoso mago transmite goce con lo que está haciendo, si se le ve disfrutar, la experiencia que revive el público adquiere un matiz más agradable.

No hablo más, les dejo con tres casos... El primer vídeo es puro arte, el segundo pura habilidad, y el tercero es...el circo del sol.

Quienes elevan a categaría de arte es el público no importa la cantidad, incluso no importa su inmeditez muchos artistas fueron rescatados despues de años del ostracismo al que les condenaron...
Teniendo esto en claro (para mi) lo primero es la intencionalidad eso es lo que me manda, no me guia el marketing, el ser reconocido, lo comercial, sino lo que deseo tranmitir y lo que deseo generar... es comun ver a lo largo de la historia artistas provocadores que sus obras perduran al margen de que gusten... porque lo escencial es lo que transmiten.
Yo jamás partiría con la pretención de hacer arte o de centrarme en la habilidad... partiría de lo que deseo transmitir. Hay quienes llegan a decir que sin intencionalidad no hay arte, cosa que para mi no vale la pena ni plantearme la pregunta puesto que la respuesta no me quitará del camino elegido.
Por último, las emociones no son universales, hay emociones que se establecen tan superfieal sobre la piel que a los segundos u horas se olvida, hay emociones que surgen colectivamente dentro de un grupo con una finalidad común... los magos sueles apreciar mas el procedimiento que el efecto y se admiran y recrean e incluso les surgen emociones perdurables.
Pero para la mayoría la técnica no dice mas que una admiración momentánea, en mi infancia e ido a infinidad de circos y muy buenos, no los que aqui se conocen, incluso algunos que haria palidecer al Cirque... y no recurdo ningun malabarista. Solo recuerdo a unos pocos ilusionistas de estos circods y paradogicamente los que mas recuerdos son los que me contaron algo. Como aquel que haciendo pasar a una anciana por un tobojan esta iba rejuveneciendo hasta llegar a tener 5 años... probablemente esta sea la edad desde la que lo recuerdo.
Finalmente lo que planteo A. Braquetti en una entrevista que se le hiciera en Barcelona creo que es revelador solo hace falta una paloma para ser recordado si esta nace desde la ilusion, el deseo de libertad, de las mano de un presidiaro en lo profundo de una marzmorra... Los magos se afanan en competencias totas de cantidad y no se preocupan de la calidad. (basicamente esta son las ideas que puso sobre la mesa)
Yo se donde me posiciono y eso es lo importante... cada uno puede poner sus pies donde prefiera...
Lamentablemente a nivel global no hay malabaristas que hayan perdurado en el imaginario colectivo de la población como artista... los ilusionistas tenemos a algunos no muchos más pero a mi entender es un indicador...