¡Interesante discusión!
Yo creo que una de las claves para entender todo esto la ha dado Daroca con el ejemplo de la persona que es muy graciosa contando anécdotas entre amigos, pero no valdría para actuar en un escenario en público. Esto transladado a la magia, sería como comparar un buen mago de cerca con un buen mago de grandes ilusiones. Evidentemente, nada que ver el uno con el otro.
Respecto a la famosa frase, completamente cierta (desde mi humilde punto de vista). La magia como tal sin trucos (al menos en mi opinion) no existe y cuando un espectador va a ver un espectáculo de magia, sabe que el mago está haciendop trampa (perdón). Ahí está la diferencia entre un buen mago y otro que no lo es: hacer que el espectador se olvide de ese (pequeño) detalle. Por eso creo que el mago sí es un actor que hace de mago, porque en realidad somos ilusionistas (o prestidigitadores...) y hacemos creer al espectador que hacemos magia.
Un saludo a todos...
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