Ortiz cita constantemente a Tamariz (en especial "La vía mágica") y a Ascanio: es evidente el influjo que ha ejercido sobre él la magia española (algo que él mismo reconocía en el prólogo de "La buena magia"). En general yo diría que es más accesible que "La vía mágica", aunque solo sea por el espacio que se toma para desarrollar los conceptos: una línea de Tamariz equivale a cuatro o cinco páginas de comentario de Ortiz (dicho lo cual, conste que si me tuviera que quedar con uno de los dos, me quedaría sin dudarlo con "La vía mágica"). Y en efecto, no incluye explicaciones de juegos más que de pasada, como ilustración práctica de las nociones teóricas que expone. Es decir, que aunque los ejemplos son muy numerosos y muchos de ellos los explica con cierto detalle, no tiene sentido comprar este libro para ampliar el repertorio de juegos.
(Aviso: soy el traductor del libro y por tanto, supongo, parte interesada. He procurado ser objetivo, pero por si las moscas...)